Todos entendemos como un año al reinicio del calendario que usamos y que, actualmente, el convenio internacional más utilizado es que estamos comenzando el 2022 de la era común. Pero te has preguntado ¿cuál es la definición astronómica de un año?, ¿por qué estamos en el 2022?, ¿todos los países usan este conteo?.
Existen diversos acuerdos económicos y culturales para definir un año. Para la astronomía un año es el lapso de tiempo en el que un planeta realiza un ciclo completo de tránsito en su órbita, alrededor de su estrella. Así, los años astronómicos de los planetas de nuestro sistema solar tienen diferentes tiempos; si los medimos en días terrestres duran aproximadamente los siguiente:
Como puedes ver, la órbita terrestre no dura exactamente 365 días, por lo que se realiza un ajuste cada 4 años añadiendo un día, el 29 de febrero; el resultado es lo que conocemos como año bisiesto.
Pasemos de la astronomía a la cultura. Actualmente, en la mayoría de los países de origen Europeo se utiliza el calendario gregoriano, basado en el egipcio, y que es más preciso que el calendario anterior usado desde la era Romana, el calendario juliano. Este último aún se utiliza en religiones ortodoxas y tiene un desfase respecto del gregoriano, por lo que su año nuevo cae el 14 de enero.
Existen otros calendarios y conteos, aquí te indicamos los principales:
Calendario chino: Es un calendario lunisolar, usado por varios países en Asia.
Actualmente corre el año 4719 e inicia en la luna nueva más próxima al solsticio de invierno; en esta ocasión ocurrirá el 1 de febrero de 2022 del calendario gregoriano y corresponde al tigre por el ciclo de signos zodiacales chinos.
Calendario hebreo o judío: También es un calendario lunisolar y es utilizado para conmemorar las festividades judías. Actualmente corre el año 5782, y el Rosh Hashanah, o año nuevo de este calendario ocurrirá entre el 25 y el 27 de septiembre en el calendario gregoriano 2022.
Calendario persa: Es un calendario solar, considerado más preciso que el gregoriano; es el oficial utilizado en Irán y Afganistán. Actualmente corre el año 1400 y su inicio ocurre durante el equinoccio de primavera. Otros países musúlmanes tienen el conteo con 3 años más, es decir, en ellos corre el año 1443.
Existen más calendarios y conteo de años en el mundo, como el Maya, el Etíope, el Alejandrino o el Copto, sólo por mencionar algunos.
Durante la sesión de preguntas de nuestro más reciente evento, la proyección del documental Dark Universe en el planetario de Cancún, hubo muchas preguntas que me llamaron la atención pero pocas de ellas –la verdad ninguna– caen dentro de aquellas preguntas que puedo contestar. Sin embargo: durante una de las preguntas salió un dato interesante que me gustaría contrastar en este pequeño documento.
Hablando de la expansión del universo, se preguntó algo como:
¿A que distancia empieza la expansión y a que magnitud es la gravedad la que reina? Porque el sistema solar no se está expandiendo, ni la Luna se está alejando de Tierra… por la gravedad.
Y es ahí donde todo se derrumbó… Porque, pues… No es cierto. De hecho, la Luna se está alejando de la Tierra a un ritmo de unos 4 centímetros anuales (3.78cm por año, dicen los puristas) y esto podría no parecer mucho pero ya de entrada echa por tierra el supuesto del universo estático a pequeña escala.
Deberíamos primero de empezar por el principio:
La luna es el único satélite natural de la Tierra. Es su compañera de juegos y aventuras desde tiempos inmemoriales. Calculamos –en colectivo, como humanidad– que se formó hace unos 4 500 millones de años y la hipótesis más aceptada de su formación es que fue resultado de una colisión entre un objeto del tamaño de Marte y una Tierra primigenia que separó material del joven planeta y que, eventualmente, se organizaría gravitacionalmente hasta ser la compañera de órbita de nuestro planeta. Así pues: la Luna actualmente es el 5to mayor satélite del sistema solar y es el mayor en proporción con respecto a su planeta: tiene 1/4 del diámetro de la Tierra y 1/81 de su masa.
La luna y la tierra comparten su danza alrededor del Sol y, en algunos casos, se ha llegado a considerar el sistema Tierra/Luna como un planeta binario. Cabe destacar que aun con el tamaño de la luna con relación a la tierra, el baricentro del sistema se mantiene dentro de la tierra, pero a unos 4683km del centro de esta. El Baricentro es el punto en el cual la masa del sistema tierra/luna se divide a la mitad. Si el baricentro estuviera fuera de la tierra entonces, técnicamente, se aceptaría el supuesto del Planeta Binario.
Una característica importante y sumamente obvia de la Luna es que, desde la Tierra, siempre vemos su misma cara. Esto no quiere decir que la Luna no rote ya que, si no lo hiciere, veríamos porciones diferentes de la luna conforme avanzara en su traslación alrededor de la Tierra. Esto quiere decir quea la luna le toma el mismo tiempo girar sobre su eje que dar una vuelta alrededor de la Tierra. Este hecho es causado por un fenómeno llamado “anclaje mareal”.
La fuerza gravitacional de la Tierra y la Luna interactúan formando mareas, esta interacción ha causado que la rotación de la luna desacelere hasta el punto en que dar una vuelta sobre su propio eje le toma el mismo tiempo que trasladarse alrededor de la Tierra. Este mismo fenómeno está causando que la tierra desacelere su rotación lenta pero progresivamente por la fricción entre las masas marinas y la superficie terrestre. Como dijo el padre Newton: la energía no se crea ni se destruye, así que esta energía rotacional que se “pierde” en la Tierra, se transfiere a la Luna de forma que esta acelera su movimiento de traslación causando que se aleje una media de 3,87 centímetros cada año.
Eventualmente, esta aceleración será suficiente como para que la Luna abandone el sistema tierra/luna al escapar de la influencia gravitacional de la tierra.
¿Cómo sabemos esto?
Como seguramente muchos de ustedes saben o se imaginan, hay necios que no aceptan los hechos si no que están dispuestos a a medirlos y comprobarlos una y otra vez. Un grupo de estos necios colocó unos espejos en la superficie de la Luna durante alguna – o varias – de las misiones Apolo, de tal forma que ahora nosotros podemos apuntar a los espejos de la luna con un laser, esperar a que se refleje y regrese a nosotros y, dado que conocemos la velocidad de la luz, podemos calcular la distancia entre la Tierra y la Luna multiplicando la mitad del tiempo que se tome el láser en ir y regresar a nosotros por la velocidad de la luz. Muy complejo? Veamos la fórmula:
LD = (t * c )/ 2
Donde:
LD es la Distancia a la Luna
t es el tiempo que se toma el láser en ir y volver a nosotros,
c es la velocidad de la luz
2 es… pues 2.
Así de esta forma podemos calcular la distancia de la Tierra a la Luna en ese momento. Debemos recordar que la órbita lunar es una elipse por lo tanto hay momentos en los que está mas lejos que en otro y deberíamos hacer un programa de varios días para poder calcular la distancia media entre la tierra y la luna.
Un último dato curioso.
A veces no dimensionamos la inmensa distancia entre la Tierra y la Luna, y es que estamos tan acostumbrados a su presencia que pocas veces nos hacemos preguntas con respecto a ella. Tomemos en consideración que el resto de los planetas puestos en línea ocuparían unos 383 193km repartidos de la siguiente forma
Mercurio: 4 879km
Venus: 12 104km
Marte: 6 794km
Júpiter 142 984km
Saturno: 116 464km
Urano 50 724km
Neptuno: 49 244km.
De tal suerte que, al ser la distancia media entre la luna y la tierra de 384 400km, todos los planetas en fila uno junto al otro cabrían entre la tierra y la luna… sin problemas. Hasta con unos metros entre ellos para no ir tan apretados como en el R1 de Zona hotelera de Cancún a las 6 de la tarde.
Espero haberte resuelto un par de dudas y haberte regalado un par más.